AMANAC indicó que es un hecho que la fuerte integración de México en las cadenas de valor a nivel internacional ha generado un aumento considerable en la inflación, ocasionado también por las alteraciones de los costos de la cadena de suministro.

Para 2022 se prevé que la economía crezca un 3.3% y un 2.5% en 2023, ya que las exportaciones seguirán beneficiándose de la fuerte recuperación de Estados Unidos, por lo tanto, el consumo se verá favorecido por la mejora gradual del mercado de trabajo y el aumento de la proporción de población vacunada, indicó la Asociación Mexicana de Agentes Navieros. 

La Asociación mencionó en su Gaceta AMANAC, que la industria estadounidense está impulsando fuertemente al sector manufacturero nacional; en este contexto, México se está recuperando gradualmente de la recesión inducida por la pandemia. 

Las exportaciones seguirán beneficiándose del fuerte crecimiento de Estados Unidos; sin embargo, un desafío clave pendiente para México es reactivar la inversión. 

Así lo indica la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), que menciona una recuperación que se ha generalizado, en donde la actividad ha mostrado una tendencia al alza en la agricultura, la industria y los servicios; este último sector muestra cierta heterogeneidad; sin embargo, la recuperación va rezagada en sectores con altos índices de contacto humano, como el ocio y la hotelería, mientras que hay otros sectores que han superado los niveles prepandémicos. 

El último estudio económico de México muestra que hay espacio para crear mejores condiciones tanto para la inversión pública como para la privada. 

No obstante, se ha visto obstaculizada por la gran incertidumbre sobre la configuración de las políticas internas. En especial, tras las propuestas de reforma del mercado eléctrico. 

El potencial para que la inversión se reactive vigorosamente es alto, impulsado por la fuerte recuperación con los Estados Unidos y el acuerdo comercial actualizado, subrayó AMANAC. 

Las tendencias de nearshoring, mediante las cuales es probable que las empresas busquen reducir los riesgos de interrupciones en la cadena de suministro ubicándose más cerca de sus mercados finales, también brindan a México oportunidades históricas. 

Convertir estas oportunidades en realidad requerirá brindar a los inversores, tanto nacionales como extranjeros, certeza sobre los contratos existentes y estabilidad regulatoria.

Contexto mundial 

De cara a múltiples crisis persistentes, es una realidad que la economía mundial necesita reformas con urgencia. 

En el transcurso del cambio de siglo, ha habido cinco grandes discontinuidades en los asuntos globales que han tenido un gran impacto: La revolución económica china de 1978; la revolución del mercado mundial que siguió; la revolución de las tecnologías de la información y la comunicación; las revoluciones demográficas; y el cambio climático. 

La velocidad con la que China ha ascendido hasta convertirse en una potencia económica global no tiene precedentes y contrasta totalmente con la antigüa perspectiva de China como un débil jugador económico global, indicó el International Institute for Management Development (IMD); de hecho, su economía aumentó un 1,3%, según los datos de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE), frente a las previsiones de los expertos de un 0,6%, indicó AMANAC.

En este entorno, la economía global continúa con una recuperación secuencial, si bien a un ritmo moderado.

El conflicto geopolítico entre Ucrania y Rusia y el reciente confinamiento de la economía China está perjudicando al precio de ciertas proveedurías a nivel global. Lo anterior está elevando los precios al consumidor. 

Así, si bien esperamos que continúe el crecimiento en el país, este será a un ritmo mucho más lento de lo previsto, que tienen los cuellos de botella que perjudicarán a la industria nacional y una elevada inflación que mermará el poder adquisitivo. 

El sector marítimo-portuario apoya a las economías regionales, en la disminución de los costos de producción y de transporte, la creación de empleos locales y la oferta de redes de traslado intermodales. 

Además de los cambios en los patrones de globalización y alteraciones en el diseño de la cadena de suministros, modificaciones en los modelos de producción, la adopción de tecnología, y los cambios en el gasto de los consumidores, sostuvo AMANAC.

Ante este panorama, el transporte marítimo emerge como un catalizador que respalda algunas de estas tendencias, impulsando la recuperación del comercio internacional y por tanto al desarrollo económico. 

En este contexto, el Presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes Diaz, afirmó que productores y comercializadores que operan en México, van a colaborar “totalmente” con el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), presentado por el presidente Andrés Manuel López Obrador. 

La economía está regida por la oferta y la demanda, el transporte marítimo juega un papel relevante, encuadrándose en el mercado económico como un hilo conductor del movimiento de la carga. 

La industria del transporte marítimo internacional es responsable del transporte de más del 80% del comercio mundial y por tanto es clave para asegurar el abastecimiento de alimentos y bienes esenciales. 

Enlace Gaceta AMANAC.


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